Tarde o temprano todo tiene un final.

Juntos habiamos conseguido dejar atrás ese ruido que no nos dejaba escuchar, ahora solo estábamos él y yo. Abrazados en la cama con el único sonido de nuestra respiración.

Estábamos en nuestro mundo de cristal, hasta que todo acabó, entonces me di cuenta de que los mundos de cristal acaban por romperse.

Podia engañar a todo el mundo, imterpretar el papel de niña buena y arrepentida, pero la verdad esque estaba más pillada por él que nunca.

Cree una fortaleza en la que nadie podia entrar, donde los días que pasamos ya no existian, ni las risas, ni nuestros besos..

Donde él se alejaba día a día de mi.